El Infantil cerró la temporada con una victoria en el campo del Balàfia que permite al conjunto de Matías Flaquer acabar el curso en la sexta posición. Los tricolores fueron netamente superiores a su rival y pusieron fin con buen sabor de boca una gran temporada.
A pesar del fuerte calor que caía sobre el municipal Manuel Lorite, el Andorra salió desde el pitido inicial decidido a hacerse con el control del partido y lo consiguió. A través de tener la posesión de la pelota, los tricolores consiguieron encerrar al conjunto local en su propio campo y solo la falta de acierto impidió que sentenciaran el duelo al descanso. Y es que antes del primer cuarto de hora, Álvaro abrió la lata transformando un penalti (12'), pero a partir de aquí, el Infantil no acabó de encontrar el acierto en los metros finales. Liam y Aitor Mazón tuvieron dos oportunidades muy claras para doblar la ventaja y Mica, muy inspirado por la banda izquierda, estuvo también un buen puñado de ocasiones muy cerca del gol.
Pero el 0-2 no llegó hasta ya la segunda parte, cuando el Andorra todavía se mostró más superior gracias al buen saber hacer de sus extremos. Los de Matías Flaquer consiguieron abrir todavía más el campo y los goles acabaron cayendo por su propio peso. En el 46', Hugo recibió en el vértice del área, se deshizo de dos defensas y superó el portero local con un disparo suave y ajustado al palo corto. Y el 0-3 llegó a la salida de un córner servido en corto en el cual Unai consiguió el ángulo necesario para enganchar un cañonazo que entró por la escuadra (61').
En pleno vendaval tricolor, el Andorra habría podido ampliar todavía más el marcador en un par de ocasiones de Diego, un tiro lejano de Èric Miró y otro de Álvaro que salió por encima el larguero. Por su parte, el Balàfia consiguió su gol en el último minuto del tiempo reglamentario en un gran disparo desde el medio del campo.
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