Debut soñado del Andorra a La Liga con una victoria en un partido complicadísimo que se ha acabado resolviendo gracias a un gol de oro de Pau Casadesús. Los tricolores han demostrado su personalidad y han acabado encontrando el premio gracias a un héroe inesperado: el lateral catalán se ha impuesto a la defensa local en un centro lateral y ha anotado el primer gol de la historia del Andorra en segunda división.
Primera parte sin casi ningún disparo a portería, pero en la cual el Andorra no se ha dejado intimidar por un conjunto local que ha intentado imponer su juego desde el inicio. Y es que los asturianos han intentado, siempre que han podido, colgar balones al área, pero los tricolores se han defendido bien. Y cuando ha tenido la pelota, el conjunto de Eder Sarabia la ha sabido hacer circular bien. De noticias cerca de las dos áreas, pero, muy pocas: de hecho, el único remate entre los tres palos en todo los primeros 45 minutos ha sido un chut muy flojo de Rubén Bover con la derecha.
Pero toda la tranquilidad de la primera parte ha quedado arreglada en los primeros minutos de la reanudación. En el 50’, Petxa ha chutado desviado, un minuto después ha replicado Hugo Rama obligando a Lizoain a desviar a córner y, aun dentro de los primeros diez minutos, Alti ha hecho lucir a Tomeu Nadal en la ocasión más clara visitante. A partir de aquí el partido se ha revolucionado, a pesar de que ninguno de los dos equipos ha encontrado precisión en los últimos metros.
En los últimos diez minutos, eso sí, el Oviedo ha dado un paso adelante y ha empezado a apretar. Sergi Enrich, Montoro y Sangalli lo han probado con remates peligrosos. Pero el Andorra ha sabido dormir el partido, un hecho al cual ha ayudado la expulsión de Sergi Enrich en el 88’ después de que el árbitro revisara el VAR. Y aquí ha llegado la opción del Andorra, que no la ha desaprovechado: en un saque de esquina servido en corto, Pau se ha impuesto a la defensa asturiana y ha dado los tres puntos al conjunto del Principado.
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