Semana atípica del FC Andorra, que desde que el martes a primera hora de la mañana partió rumbo a Linares todavía no ha pasado por el Principat: seis días fuera de casa para afrontar de la mejor manera posible los dos partidos que tenía consecutivos a domicilio. El primero, contra el Linares, acabó con derrota, motivo por el cual los tricolores afrontan la visita al Estadi Balear con más ganas que nunca de conseguir un resultado positivo.
Los de Eder Sarabia no han perdido dos partidos seguidos en toda la temporada y son conscientes que una victoria contra el Atlético Baleares, rival directo en la lucha por la promoción de ascenso, sería una inyección de moral enorme. "A veces cuando ganas pasas por alto ciertos errores que te alejan de la victoria, así que lo que hemos intentado hacer es sacar la parte positiva y aprender de lo que pasó el último día", reflexionaba el técnico, que explicó que el equipo tiene "muchas ganas" de afrontar un partido ante un "rival muy duro y que también se juega mucho".
Para conseguir la victoria, Sarabia tiene claro que los tricolores tendrán que ser "más valientes y estar más convencidos" que el pasado miércoles en Linarejos: "El otro día nos faltó convencimientos. Creo que estuvimos demasiado pendientes del resultado y dejamos de hacer cosas que normalmente hacemos", remataba el técnico que explicó que, después de un día jodido y de reflexión, sus jugadores acumulan dos muy buenas sesiones de entrenamiento.
Por último, la gran noticia de la semana es que con el retorno de Carlos Martínez a la dinámica de entrenamientos del equipo, el técnico podrá contar con todos los jugadores de la plantilla.
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